Finalmente este 20 de enero Donald Trump rendirá protesta como presidente de los Estados Unidos, consumando así uno de los sucesos que más temor e incertidumbre ha provocado a nivel internacional en los últimos tiempos. Entre las implicaciones que la llegada al poder del magnate tendrá para el pueblo estadounidense se encuentra el acceso a la salud, pues se calcula que en el primer año de su mandato hasta 18 millones de personas podrían quedarse sin seguro médico.
De acuerdo con un análisis realizado por la Oficina de Presupuesto del Congreso, la cual carece de filiación política, de cumplir Donald Trump con su “amenaza” de desaparecer el Acta de Cuidado Asequible (mejor conocido como Obamacare), serían 18 millones de estadounidenses los que quedarían sin seguro médico antes del final de 2017, y la cifra se incrementaría hasta los 32 millones en la próxima década.
Según se detalla en el informe, la razón de este decremento en el número de personas aseguradas se debería principalmente a la eliminación de la penalización para aquellas personas que no adquieran un seguro, así como la eliminación de los subsidios gubernamentales, situación que haría los seguros incosteables para varios millones de estadounidenses.
Si bien el presidente electo ha hablado en varias ocasiones sobre su intención de reemplazar el Obamacare con un nuevo programa de menor costo y que beneficiará a más personas, hasta el momento no ha dado a conocer detalles sobre el mismo.
Por otra parte, el análisis también señala que tras la eliminación del Obamacare las primas de los seguros se aumentarán entre 20 y 25 por ciento, además que se prevé que muchas compañías aseguradoras dejarán de ofrecer planes una vez que el contar con un seguro deje de ser obligatorio.
De momento sólo resta esperar y ver si Donald Trump cumple con su promesa de crear un nuevo programa que asegure la salud de sus compatriotas o si simplemente éstos comenzarán a despedirse de su salud.
