Indudablemente ya has escuchado hablar del feng shui, el arte ancestral chino que busca mejorar las condiciones ambientales del entorno para fomentan el bienestar y la armonía general del individuo pero, ¿te habías planteado la posibilidad de aplicarlo en tu propia oficina?
Como médico estás necesitado de un espacio privado para atender tus asuntos pendientes, y ya que seguramente deberás pasar buen tiempo en tu oficina, te conviene hacerlo en un ambiente armonioso, agradable a la vista y que te llene de energía.
Por ello, considera usar el feng shui en esta área de trabajo aplicando los siguientes consejos:
1. Recuerda que tu ambiente refleja lo que eres
Antes de comenzar a redecorar tu oficina pregúntate qué es lo que quieres que diga de ti, pues seguramente en ella recibirás a colegas, empleados, proveedores de servicios e, incluso, familiares y amigos.
Si tienes, por ejemplo, un pequeño escritorio que frecuentemente se desordena (o desordenas de acuerdo con tu carga de trabajo), quizás sea momento de cambiarlo por uno más amplio, pues necesitas contar con un espacio que te permita atender tus asuntos libremente sin que diga “soy un desastre”.
2. El orden es prioritario
Si bien el trabajo puede obligarte a llenar de documentos tu escritorio, éste debe conservar cierto orden para que permita fluir tu energía. Por ello, hay que procurar tener al menos la mitad de su área visible una vez al día.
3. Considera tu ubicación dentro de la oficina
Según las prácticas ancestrales del feng shui, nunca deberías sentarse de espaldas a la puerta para evitar recibir el chi (energía) negativo, de modo que lo más recomendable es colocar tu escritorio lo más lejos de la puerta, dejando a tu espalda un muro para colocar tus diplomas y reconocimientos a fin de inspirar autoridad y confianza en tus pacientes, colegas y demás personas que te visiten.
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