Montar un consultorio propio no es un asunto sencillo y bastantes médicos independientes pueden dar testimonio de ello. La vida de un profesional de la salud es demandante y lo es aún más cuando decide emprender por cuenta propia. El reto se antoja difícil, pero con disciplina y constancia cualquier meta se puede lograr.
Pero como bajo advertencia no hay engaño, esto es lo que necesitas saber (y que nadie más te dirá) antes de volverte un médico independiente:
Tu trabajo te absorberá casi por completo
Para evitar que tu empresa de salud fracase, siempre deberás estar ahí para ella. Ser médico independiente significa que serás quien tome las mejores decisiones y quien siempre dé la cara por la empresa.
Tu vida social dará un giro radical
Tu pasión por las cosas será algo que muy pocas personas puedan entender. Cada día se convertirá en un reto, así que necesitarás del empuje y motivación de los miembros de tu familia y amigos para alcanzar todas tus metas.
El emprendimiento es un experimento de prueba y error
Esto a veces es inevitable, pero recuerda que al ser quien toma las decisiones importantes al interior de la clínica o consultorio deberás evitar que el miedo y la falta de confianza te dominen ya que podrías tomar la peor elección de todas, lo que podría poner en peligro la salud de un paciente.
Siempre deberás ser persistente
Mucha gente imagina a los emprendedores como personas en lo más alto de una montaña, ostentando un enorme trofeo. Podría ser cierto, pero existe una parte que no se ve y que son las interminables horas de trabajo y la cantidad de intentos que los emprendedores realizan para llegar al éxito. Así que recuerda que para alcanzar tus metas, nunca debes dejar de lado la persistencia.
