Para cualquier persona en el sector salud, abandonar la práctica puede ser algo difícil siquiera de pensar. Aunque hay muchas cosas que puedes hacer cuando decidas colgar la bata, necesitarás un respaldo financiero. Por ello, independientemente si eres parte de un equipo de expertos o dueño de tu propio consultorio o centro de salud, debes pensar en un plan de retiro.
Si de hecho eres el dueño de tu propio negocio dentro de la industria médica, podrías considerar muy costoso o innecesario tener un plan de retiro. Lo cierto es que, a simple vista, no todos los emprendedores pueden ver el beneficio de estos instrumentos. Sin embargo, hay algunos factores que tal vez no habías visto que podrían convencerte de ofrecer esta prestación:
Contribuye a tu estabilidad financiera
Un plan de retiro para todo el consultorio no solo protege el futuro de tus colaboradores, sino también el tuyo. Tal vez planees dejar a alguien a cargo del negocio mientras tú recibes todavía parte de las ganancias. Incluso, puede que haya pasado por tu mente venderlo y utilizar la ganancia para vivir. Lo cierto es que, en el futuro, no puedes asegurar que siga siendo redituable.
Un plan de retiro es atractivo para el personal
Si tienes a un equipo de profesionales talentosos, probablemente harás lo que esté en tus manos para mantenerlos. Asegurarles un provenir a largo plazo puede ser una buena forma para asegurar fidelidad. Incluso en futuras contrataciones recibirás más aspirantes. Estas prestaciones no solo son llamativas, también demuestran una verdadera preocupación por los colaboradores.
Permite deducir impuestos
Dependiendo del tipo de plan de retiro, la ley permite que tanto los colaboradores como el consultorio deduzcan algunas aportaciones. Es necesario que revises las condiciones que aplican para cada caso. Sin embargo, puede significar un ahorro significativo para tu personal y también abrir oportunidades financieras a tu negocio.