De acuerdo con la Real Academia de la Legua Española, nacer significa (en el caso de los seres vivos) salir del vientre materno, del huevo o la semilla. Si bien el nacimiento, al igual que la muerte, es un proceso por el que todo ser viviente debe de atravesar una vez en la vida, existen casos como el de LynLee Boemer, la bebé texano que debió nacer en 2 ocasiones.
La curiosa historia de LynLee Boemer comienza durante un ultrasonido de rutina efectuado en su madre Margaret Boomer, estudio durante el cual se detectó que el producto (con 16 semanas de gestación en ese momento) había desarrollado teratoma sacrococcigeo, el tipo de tumor más común en bebés con una incidencia de uno en cada 35 mil nacimientos.
Aunque la recomendación de la gran mayoría de los médicos fue la de poner fin al embarazo para evitar complicaciones, el doctor Darrel Cass del Texas Children’s Hospital de Houston sugirió retirar el tumor a través de un procedimiento quirúrgico, mismo que había realizado con antelación siete años atrás.
Siete semanas después de que el tumor fuese detectado (semana 23) el tumor había alcanzado una masa similar a la del producto por lo que se procedió a realizar la cirugía, para lo cual el producto fue retirado quirúrgicamente del vientre de su madre.
Tras remover el tumor cancerígeno el producto fue insertado de nueva cuenta en el vientre materno, donde permaneció por 12 semanas más antes de nacer por segunda ocasión vía cesárea poco antes de las 36 semanas de gestación.
Siete días después de su segundo nacimiento LynLee fue intervenida por segunda ocasión para remover los residuos del tumor que no pudieron ser extraídos durante la primera operación y tras permanecer un par de días más en observación pudo finalmente ir a casa con sus padres.
