Una de las peores cosas que puede ocurrirle a un negocio, sin importar a qué se dedique, es la falta de clientes y por ende, la disminución de ventas y la posterior fragilidad financiera.
Si como médico has notado que esto ocurre con tus pacientes, es hora de prender la alarma de emergencia.
¿A qué se debe esta debacle?
Podría ocurrir por cualquier cantidad de factores, pero el más común es que tu competencia se está esforzando por ofrecer un servicio mejor al tuyo, y la atención médica personalizada y cordial es un punto que cualquier profesional de la salud debe tomar en cuenta.
Si te encuentras en esta encrucijada, tienes dos opciones: seguir con tu misma estrategia que te ha llevado a perder más ganancias, o desarrollar un nuevo plan de marketing para mejorar tu servicio.
Si decides llevar a cabo la última opción, empieza por hacer caso a los siguientes tres consejos:
- Averigua en qué fallaste. Si notas que cada semana que pasa la situación empeora, a pesar de que tus pacientes saben que estás ahí, entonces toma la iniciativa y háblales por teléfono y pregúntales la causa por la que no han regresado a tu consultorio. Te recomendamos que realices una encuesta de satisfacción para que sepas qué es lo que más les gusta de tu clínica, si el servicio que recibieron fue de su absoluta satisfacción o si debes mejorar en algo. Cuando obtengas esta información, cambia lo que debas modificar para beneficio de tu consultorio.
- Receta comodidad y bienestar. Tus pacientes ya llevan sobre sí la fuerte carga de padecer un malestar físico. Al menos tratado aminorarlo adecuando tus instalaciones para que ellos se sientan cómodos. Ofréceles un snack, incorpora un servicio de cafetería, coloca pantallas de televisión, pon música ambiental relajante, etc.
- Reduce tus honorarios. Esta estrategia debería ser lo último que hagas para atraer más pacientes ya que podrías afectar la rentabilidad de tu consultorio. Si lo haces, procura hacerlo de forma temporal u ofrece promociones ocasionales.
