Aunque los primeros registros de tatuajes se remontan a varios miles de años en el pasado, ha sido durante las décadas más recientes que esta práctica ha cobrado auge en todo el mundo y cada vez resulta más común observar a personas que gustan de adornar su piel de por vida… aunque ahora ha surgido una nueva y peligrosa moda.
De forma tradicional, los tatuajes se colocan sobre la piel, siempre con las medidas higiénicas pertinentes para evitar la transmisión de enfermedades como la hepatitis C, pero ahora una nueva tendencia, que principalmente se ha observado en Estados Unidos y Japón, ha causado alerta. Se trata del Tateeth, nombre con el que se denomina a los tatuajes en los dientes.
Pese a que este tipo de adornos no se realizan directamente sobre el esmalte de los dientes sino que se aplican sobre una corona de porcelana, es el método de fijar las piezas dentales el que puede causar daños irreparables a la salud de las personas.
Lo anterior es debido a que para fijarlos se debe de limar el diente, método en demasía agresivo que genera dolor, sensibilidad extrema y molestias insoportables que inclusive pueden llegar a provocar la pérdida de la pieza dental del paciente.
Por otra parte, hay que recordar que de acuerdo con un estudio realizado el año pasado por científicos de la Universidad de Harvard (HU), las personas con antecedentes de enfermedades periodontales tienen 64 por ciento más probabilidades de padecer cáncer de páncreas, lo que agrega un riesgo más a la moda de los tatuajes dentales.
