Las actividades de un médico cada vez se han convertido más numerosas y más complejas, lo que genera una fuerte carga de estés.
El número de pacientes que demanda acceso a los servicios de salud seguirá creciendo en los próximos años, esto en parte, por el alza de las enfermedades crónicas que afectan a gran parte de la población.
Y si a esto agregamos que la tecnología médica avanza a la velocidad de la luz, pues ahora existen aparatos e instrumental médico más efectivos que permiten realizar cirugías más complejas, el resultado puede ser un tanto desalentador en apariencia: a mayor volumen de responsabilidad y más complejidad, los errores potenciales podrían ocurrir con más frecuencia.
Al respecto, el doctor Fernando Pérez Galaz, administrador de riesgos clínicos y especialista en cirugía digestiva en el Hospital Ángeles, señala que en México, el IMSS realiza todos los días cerca de 485 mil 200 consultas, 5 mil 496 egresos hospitalarios, 4 mil 139 cirugías, 758 mil 657 análisis de laboratorio, etc.
El especialista señala que de acuerdo al INER, en 2008 los índices de prevalencia de eventos adversos asociados a los servicios médicos hospitalarios arrojó una cifra de 9.1 por ciento.
De tal forma, explica Pérez Galaz, si se toman en cuenta las estadísticas del IMSS, se pueden observar algunos riesgos potenciales, como por ejemplo:
Intervenciones quirúrgicas: 372.5 cirugías con un riesgo de evento adverso asociado a la atención médica. Esto es, 372 x 365 = 135 mil 780 intervenciones con riesgo de presentar situaciones adversas al año.
¿Cómo evitar este problema?
Fernando Pérez Galaz señala que la medicina debería aprender de otros rubros altamente complejos como lo son la industria nuclear o la aeroespacial.
Finamente, como bien lo declaró el Colegio Americano de Ginecología y Obstetricia en un estudio, las intervenciones a favor del paciente no tendrán éxito sin una cultura que sea receptiva a esa seguridad. “Ésta cultura sólo puede tener lugar con líderes organizacionales a individuales comprometidos que entiendan la importancia de la seguridad del paciente”, se lee en dicho estudio.
