13 muertos y 136 heridos es el saldo que ha arrojado hasta ahora la explosión ocurrida en la planta petroquímica Clorados 3 del complejo Pajaritos en Coatzacoalcos, Veracruz, perteneciente a Pemex.
La noche del miércoles 20 de abril se reportaron 136 trabajadores lesionados, 48 de los cuales ya fueron dados de alta, sin embargo, 13 se encuentran en estado grave, según reveló José Antonio González Anaya, director de Petróleos Mexicanos.
Una vez que la temperatura extrema del lugar descienda, las autoridades federales regresarán para verificar las condiciones de seguridad en la zona afectada e iniciar las investigaciones pertinentes a fin de determinar las causas del accidente.
A través de un comunicado, la paraestatal aseguró que la calidad del aire no representa riesgo para la salud de los habitantes del lugar. En tanto, en entrevista televisiva, González Anaya negó que Coatzacoalcos esté en peligro tóxico por las emisiones ocasionadas por la explosión y descartó que exista riesgo una nueva detonación.
En este sentido, los médicos pueden ayudar a la población difundiendo orientación sobre lo que se debe hacer en casos de emergencia como éste, utilizando su blog de salud, redes sociales, o bien, directamente en su consultorio, con lo que, a la vez, fomentan el posicionamiento de su marca profesional y demuestran el interés que sienten por la comunidad.
Entre las recomendaciones que nunca deben faltar (ya sea a través de folletos, artículos, videos o entradas para redes sociales, entre otros materiales) se encuentran:
1. Resguardarse bajo un mueble sólido (como mesa o mostrador) al escuchar una explosión, o tirarse al suelo protegiendo la nuca con las manos.
2. Esperar unos momentos para que se disipe el humo o polvo antes de salir, ya que pueden ocurrir derrumbes.
3. Buscar construcciones sólidas u hondonadas libres de objetos que actúen como proyectiles al desprenderse (por ejemplo lámparas, piedras, tabiques o cristales).
4. Huir de cualquier nube de gas en dirección transversal al viento y abstenerse de originar un punto de ignición, por ejemplo, al encender el motor del auto o un fósforo.
Ante riesgo de una explosión, las personas deben saber que hay que alejarse de la casa o centro de trabajo más de 500 m. para buscar una zona dónde protegerse.
Asimismo, es importante hacer de su conocimiento que la presión que puede generar el aire en la zona afectada llega a causar lesiones internas que suelen agravarse con el paso de los días.
