Actualmente prueban en Australia la efectividad de la brainBAND, un wearable médico capaz de valorar la gravedad de las conmociones cerebrales sufridas por deportistas, sobre todo de rugby y futbol americano.
La cinta deportiva inteligente, creación del diseñador industrial Braden Wilson y del neurocientífico Alan Pearce como parte de la iniciativa Samsung Mixed Talents (del gigante de la tecnología Samsung), posee sensores que transmiten en tiempo real a médicos, entrenadores y árbitros información que revela la importancia de un golpe en la cabeza durante la actividad en el terreno de juego.
Hasta el día de hoy, la decisión de dejar a un deportista en la cancha tras sufrir un impacto de importancia es subjetiva, sin embargo, con la cinta deportiva inteligente se espera poder disponer de variables objetivas que ayuden a tomar decisiones al respecto.
La brainBAND también permitiría señalar a través de un dispositivo de luces LED los efectos de un golpe aparentemente inofensivo.
El prototipo de la cinta deportiva inteligente se probó entre jugadores de rugby amateur en Australia, para afinar su diseño y capacidad para registrar pequeños golpes en la cabeza que podrían tener efecto acumulativo.
Aunque esta tecnología aún requiere de pruebas para poder comercializarse, profesionales del rugby como Israel Folau ya colaboran en los ensayos.
