De acuerdo con Dipanjan Pan y Santosh Misra, investigadores de la Universidad de Illinois, la curcumina tiene efectos anticancerígenos comprobados, pero no puede utilizarse en tratamientos debido a su baja solubilidad en agua. Esta propiedad física hace a la especia inútil para desarrollar una terapia farmacéutica, ya que no puede viajar por el torrente sanguíneo.
Sin embargo, los especialistas descubrieron, junto a su equipo de investigación, un método para hacer viable a la curcumina como medicamento para el cáncer. El estudio fue publicado en Proceedings of the National Academy of Sciences y describe cómo el grupo consiguió aprovechar las propiedades del platino para llevar la especia a las células cancerígenas.
Los ingenieros crearon un complejo metalocíclico con el platino y la curcumina, que permitió unir las moléculas de ambos agentes para que pudieran navegar el flujo sanguíneo. Debido a que el metal se utiliza frecuentemente en terapias anti-cáncer, la unión de ambos elementos dio lugar a un tratamiento 100 veces más efectivo para eliminar células en melanoma y cáncer de mama.
El efecto anticancerígeno de la curcumina se expresa en su capacidad de fosforilzar el marcador STAT3. En estudios in vivo, este elemento permite a las células de cáncer sobrevivir y crecer. Sin embargo, la combinación entre la especia y el platino permite asesinar a estos microorganismos al fragmentar su ADN.
A pesar que el estudio se enfocó en hacer soluble la curcumina, los investigadores esperan que este método pueda servir para hacer viable el uso de otras sustancias para terapias anti cáncer. Incluso se podría aumentar la eficacia de agentes ya existentes.
Uno de los grandes usos de esta terapia combinada entre curcumina y platino, de acuerdo con Dipnjan Pan, sería su capacidad para combatir a los microorganismos cancerígenos con propiedades de células madre:
Es cada vez más obvio que las células madre cancerígenas son responsables de la reaparición de tumores […]. Pero si podemos aplicar un tratamiento directamente a estos microorganismos, podemos prevenir que esto pase.
Los investigadores continuarán examinando la utilidad de los complejos metalocíclicos para desarrollar terapias personalizadas contra el cáncer con compuestos diferentes a la curcumina.
