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Echa de tu consultorio a estos enemigos de la productividad

Estos son algunos factores que podrían afectar la capacidad laboral al interior de tu consultorio médico.
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Muchas oficinas (incluyendo los consultorios) están expuestas a ciertos enemigos que pueden mermar la productividad laboral, por lo que es muy importante que aprendas a identificarlos a tiempo ya que son capaces de echar raíces en tu cultura organizacional.

Éstos son algunos factores que podrían afectar tu capacidad laboral al interior de tu consultorio médico:

Torres de documentos en tu escritorio

Si el escritorio de tu consultorio siempre está atiborrado de documentos (entre éstos los historiales de tus pacientes) ten mucho cuidado  ya que podrías perder información muy importante que podría ocasionarte serios problemas. Opta por adquirir un software que te ayude a gestionar la información de tus pacientes o al menos, compra archiveros que permitan tener mejor organizada la información de tu consultorio.

Poca o nula planificación

Si te riges bajo un esquema de productividad en el que no existe una programación de actividades diarias, semanales y mensuales, quiere decir que estás trabajando sin rumbo fijo y que debes desechar este esquema de trabajo de inmediato.

Pierdes el tiempo en actividades sin importancia

Si al terminar el día te das cuenta que te enfocaste en actividades de muy poca importancia que bien pudieron haber sido realizadas por otra persona, estás cometiendo un error muy recurrente que puede impedir que alcances tus objetivos principales.

No delegas el trabajo

Este punto tiene que ver con el anterior y se trata de aprender a delegar para empoderar a ciertos elementos de tu equipo de trabajo. Ubica a las personas que pueden hacer que tu jornada sea más productiva.

Centras tu atención en el celular y redes sociales

¿Sabes cuántas veces miras tu celular tus redes sociales? Como profesional de la salud tu atención debería estar más enfocada a la administración de tu clínica o a la atención de tus pacientes. A veces tu celular puede convertirse en el peor enemigo de la productividad.

Si has reconocido a alguno de estos enemigos entonces has dado un paso importante para aprender a controlar estas conductas nocivas en tu consultorio. Hazles frente y elimínalos de tu lugar de trabajo.

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