Los médicos suelen estar acostumbrados a exigirse a sí mismos y a los demás excelencia, ya que cometer errores en su profesión puede resultar sumamente caro, pero en la vida cotidiana tratar de ser perfectos no siempre es bueno, ¿sabes por qué?
El perfeccionismo es actitud que suele fomentarse en la sociedad, ya sea en el seno de las familias o comunidades religiosas, por mencionar un par de ejemplos, sin embargo, tratar de ser perfectos en la vida conlleva riesgos como deterioro de la salud por causa del continuo estrés que se vive; relaciones personales conflictivas debido a un comportamiento que no admite fallas; y baja autoestima al notarnos imperfectos.
Por ello, conviene hacer un ejercicio de autoanálisis a fin de determinar si eres un médico que busca la excelencia, o una persona perfeccionista que puede dañarse sin saber y, para eso, te ofrecemos los 14 signos que, según de “The Huffington Post”, caracterizan a estas personas:
- Siempre estás dispuesto a agradar mediante tus logros, pero cuando no lo consigues te sientes frustrado.
- Estás consciente de que buscar la perfección te hace daño, sin embargo, crees que es el precio que hay que pagar por el éxito.
- Pospones tareas u obligaciones como medio para postergar la desaprobación de los demás.
- Criticas a la gente porque eres sumamente exigente.
- Te embarcas en proyectos con resultados seguros, en caso contrario prefieres no arriesgarte.
- Te cuesta trabajo abrirte con quienes te rodean.
- Te obsesionan tus errores, por pequeños que sean.
- Piensas que no eres lo suficientemente bueno para hacer las cosas.
- Te pones a la defensiva cuando te critican.
- Sientes que lo que haces es insuficiente y tu motivación permanente es concretar “pendientes”.
- Sientes nervios ante la posibilidad de que te consideren del “montón”.
- Sientes alivio o placer cuando otros cometen errores.
- Experimentas nostalgia por tu época escolar.
- No te gusta mostrar vulnerabilidad.
¿Qué opinas, eres médico que busca la excelencia o un perfeccionista?
