A pesar de los esfuerzos para controlar el consumo de antibióticos en todo el mundo, algunos estudios señalan que esta práctica ha aumentado significativamente.
Un estudio realizado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), señala que el consumo abusivo de antibióticos ha aumentado principalmente en los países de bajos y medianos ingresos. Turquía y Grecia son los países que encabezan esta lista con 42.2 y 32.2 dosis diarias por cada mil personas respectivamente. La OCDE ha mencionado que dichas cifras son verdaderamente alarmantes ya que están muy por arriba de la media de consumo de las naciones que pertenecen a esta organización.
Por otra parte, la OCDE menciona a los Países Bajos como una de las naciones con menor consumo de antibióticos con 10.8 dosis por cada mil personas.
Autoridades de dicha organización ya habían mencionado en el 2015 que para establecer una normatividad que ayude a reducir el consumo innecesario de antibióticos, es de suma importancia que los diferentes países involucrados desarrollen programas que incluyan vigilancia, regulación y educación por parte de los médicos a los pacientes.
La OCDE señala que una de las principales razones del consumo desmedido de estos fármacos se debe a las diferencias culturales y al tipo de cuidado que los pacientes esperan recibir.
