Megan Pryde, una joven inglesa de 19 años, murió a causa de cáncer de colon que los médicos le diagnosticaron en un principio como estreñimiento severo.
De acuerdo con familiares y amigos de Megan, ella era una persona que tenía diversos objetivos que aún le faltaban por cumplir, sin embargo, todo quedó en sueños después de que un diagnóstico equivocado.
“No revisó (el médico) a fondo su caso y simplemente dijo que tenía estreñimiento”, dijo la madre de la joven al diario Mirror.
Cuando Megan sintió malestar estomacal y no lograba ir al baño por días, decidió visitar al doctor. Ella tenía la esperanza de que le detectarían el problema que estaba padeciendo y que con un tratamiento correcto todo se resolvería. El primer médico al que visitamos le diagnóstico estreñimiento severo, le recetó un medicamento el cual tomó por varios días. Desafortunadamente el malestar estomacal no se detuvo y por más pastillas que tomaba el mal seguía allí.
Después de una segunda visita y de varios exámenes con un médico distinto, Megan recibió una dolorosa noticia: los análisis revelaron cáncer de colon en etapa bastante avanzada por lo que ya no se podía hacer nada.
Cuando la joven recibió la noticia, de inmediato inició una lucha por concientizar a la sociedad de que el cáncer de colon no sólo es una enfermedad que afecta a las personas de mediana edad o personas mayores, también puede desarrollarse en personas muy jóvenes, lo cual, de acuerdo con algunos expertos, es una enfermedad que presenta un incremento entre la población juvenil a nivel mundial.
Finalmente, después de 16 meses, Megan Pryde falleció.
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