Reza el dicho que “es de sabios cambiar de opinión”, pero también lo es de galenos, pues ciertamente aunque hay gente comprometida con la profesión médica también existe quien tiene otras inquietudes que desearía explotar… ¿Te atreverías a hacerlo?
Imagina a un chico que siente pasión por la medicina. Se dedica a estudiar la carreta, se titula como médico, hace la especialización en pediatría, trabaja para un hospital pero, un día, decide que quiere vivir de la música, la cual le permite establecer una empresa que le facilita tener considerables ganancias económicas.
¿Suena increíble?.. Pues este es un caso real, ya que en resumen todo eso le ocurrió a Carlos García Juanicó, un pediatra argentino que un buen día decidió que quería ser DJ.
Tras cuatro años de ejercer como pediatra en el Hospital Presidente Perón de Avellaneda y el Hospital de Clínicas, empezó a pensar en vivir de su otra vocación, y aunque en un inicio intentó combinar la pediatría con la música, sintió que el camino correcto era el segundo.
Así, en compañía de cinco socios, creó Grupo Sarapura, una empresa dedicada a la musicalización y organización de eventos sociales, la cual ya tiene 12 años de vida y en 2015 facturó 30 millones de pesos argentinos:
Arrancamos seis fundadores y en este momento somos cuatro. Empezamos con espíritu emprendedor, sin tener demasiado claro cómo llevar esa pasión por la música a generar una empresa.
Actualmente, Grupo Sarapura tiene 40 empleados y organiza unos 2 mil eventos sociales por año, además, cuenta entre su cartera de clientes a enormes compañías como Nestlé y Coca-Cola.
Sobre la fórmula de su éxito, García Juanicó explicó al diario La Nación:
Cada uno de los socios fue encontrando el nicho que le caía mejor a cada uno. Generamos una unidad de negocio que trabaja con los dueños de un salón como cliente, otra dedicada a la fiesta social tradicional, una tercera enfocada en el mundo corporativo y otra especializada en la artística.
La historia de este pediatra quizás no sea la del éxito en el ejercicio de la medicina, pero sí un gran éxito en una particular forma de vivir la vida, pues además de ser médico como él quería, ahora vive muy satisfecho de otra pasión, la de DJ, lo que, a su vez, le permitió probarse como emprendedor y abrir un establecimiento que sigue creciendo pues, según sus proyecciones, la empresa cerrará 2016 con volumen de facturación del 30 por ciento por encima de la inflaciónn de sus país, ya que tiene ocupadas fechas de servicio hasta agosto de 2017.
Ahora que conoces el caso de Carlos García Juanicó, ¿te arriesgarías a probarte en otros ámbitos distintos al de la medicina?
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