Diariamente recibes en tu consultorio a decenas de pacientes que presentan diversos síntomas y problemas que deben ser diagnosticados, requiriendo, en la mayoría de los casos, la elaboración de recetas médicas, las cuales en muchas ocasiones son imposibles de comprender para los pacientes, no únicamente por la caligrafía, sino por el lenguaje empleado en ellas.
Aunque se trata de un proceso simple, esto podría estar próximo a cambiar, al menos en el Reino Unido donde la Academy of Medical Royal Colleges (AMRC) ha solicitado a todos los médicos británicos que escriban sus recetas con un inglés “amigable y entendible”, esto con el objetivo de que no sean malinterpretadas por los pacientes.
En ese sentido, dentro de las recomendaciones de la AMRC destaca evitar el uso de frases en latín, jerga médica compleja y abreviaturas que sean difíciles de entender para personas ajenas al sector sanitario.
De esta forma, lo que se busca es que las recetas médicas sean simples para otorgarle mayor seguridad a los pacientes y así evitar confusiones, debido a que se ha detectado que en ocasiones no logran entender lo que realmente dice el documento, lo que fomenta que abandonen los tratamientos.
De manera más concreta, la ARMC propone referirse a ‘riñón’ en vez de ‘renal’, decir ‘dificultad para respirar’ en lugar de ‘disnea’, utilizar ‘a largo plazo’ cuando se hable de ‘crónico’ o utilizar la palabra ‘hígado’ si se hace alusión al concepto de ‘hepático’, los cuales son conceptos que también se pueden cambiar durante las consultas médicas para hacerlas más amigables y entendibles a los pacientes.
Pero a pesar de que sólo se trata de una recomendación para médicos ingleses, ¿crees que en México debería ocurrir algo similar o es una exageración?