Médicos sin Fronteras España (MSF-España) presentó recientemente su memoria de actividades 2015, un año en el que Europa se convirtió en “la frontera más letal del mundo”.
Mila Font, delegada de Médicos Sin Fronteras en Valencia, señaló que el año pasado estuvo marcado por el “aumento de crisis” sociales y su gravedad, asimismo, lamentó la falta de respuestas políticas y humanitarias “adecuadas” para las cuatro emergencias decretadas por Naciones Unidas en 2014: Siria, Irak, Sudán del Sur y República Centroafricana.
Indicó que el “incumplimiento” de los gobiernos en sus obligaciones con los refugiados ha ocasionado incremento en el presupuesto anual de la organización en un 30 por ciento con respecto al año anterior, superando así los 156 millones de euros erogados en 2015, explicó MSF-Valencia.
Font destacó que el Mediterráneo “se está convirtiendo en una fosa común para las personas que intentan llegar a Europa huyendo de la guerra, la enfermedad y la persecución”, y que en apenas tres años se han perdido más de 10 mil vidas.
Al respecto, comentó que en Siria hay “una espiral de violencia sin fin” que en la última década ha multiplicado por cuatro el número de personas desplazadas y “millones de ellas se han encontrado ante las puertas cerradas de una Europa que opta por la externalización de las fronteras”, destacó la representante de MSF-Valencia.
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