Si la mayoría de tus pacientes pasan 8 horas sentados en sus trabajos, entonces recomiéndales caminar una hora al día.
Esto es lo que dijeron científicos de la Escuela Noruega de Ciencias del Deporte, quienes después de analizar los datos de más de un millón de personas, encontraron que 60 o 75 minutos de ejercicio de intensidad moderada es capaz de revertir el daño de pasar sentado al menos ocho horas al día.
“El sedentarismo puede dañar la salid tanto como el tabaquismo”, dijeron los expertos, quienes añadieron que el riesgo añadido de pasar al menos cinco horas al día viendo la televisión es tan alto, que ni siquiera con ejercicio se podría revertir el daño.
“Hacer ejercicio después del trabajo es muy importante. La gente tiene tantas opciones pero no las lleva a cabo. Algunos podrían realizar una pequeña caminata a la hora del almuerzo, salir a correr por la tarde o muy temprano por la mañana, e incluso ir al trabajo en bicicleta”, dijeron los expertos.
Confirmaron que pasar sentado muchas horas en la oficina o en casa no es saludable para el organismo. “Nuestra investigación se basó en el número de horas que la gente permanece sentada, sus niveles de actividad física y sus hábitos de ver televisión. Casi todas las personas que analizamos rebasaban los 45 años de edad”, dijo Lars Bo Andersen, co autor del estudio.
“Encontramos que las personas que realizan más actividad física moderada (60 a 75 minutos al día), eliminaron el riesgo elevado de muerte relacionada con permanecer sentado más de ocho horas al día. Pero este régimen de actividad física no fue suficiente para contrarrestar los riesgos de pasar más de cinco horas frente al televisor todos los días”, apunta el científico.
“El estudio es muy convincente, pues la inactividad eleva el riesgo de desarrollar diabetes y enfermedades cardiacas debido a que incrementa los niveles de insulina y detiene el metabolismo del organismo. Y si a esto le sumamos que mientras ven televisión, mucha gente consume comida chatarra, estos problemas de salud se duplican”.
Andersen mencionó que si una persona camina y siente su cuerpo caliente, y su respiración es más pesada de lo normal, con eso es suficiente. “No es necesario ir a un gimnasio y terminar bañado en sudor para recibir los beneficios del ejercicio”.
