En días anteriores el gobierno de Estados Unidos declaró una emergencia sanitaria ante la creciente adicción a los opioides, situación ante la cual la policía de Massachusetts ha optado por implementar una base de datos que transmite en directo la aparición de nuevos casos de sobredosis, cuyo objetivo es compartir en tiempo real los registros con los médicos para poder canalizar a los pacientes y comenzar su tratamiento de forma inmediata.
La problemática del consumo excesivo de opiáceos es generada por la baja cantidad de personas con un tratamiento para reducir su adicción, por lo que el experto en asuntos criminales Sean Varano, de la Universidad Roger Williams, quien realiza pruebas de una base de datos junto con la agencia de análisis de información Kelley Research Associates, tiene por objetivo contribuir con las medidas de acción para erradicar la epidemia opioide en Estados Unidos.
La base de datos de la sobredosis opioide funciona cuando algún departamento policíaco es llamado mediante la notificación de un caso de sobredosis en cualquiera de los condados, entonces se realiza su registro en el sistema para enviar una alerta al centro médico de la zona que inicie con el tratamiento.
El motivo para desarrollar esta base de datos es que resulta perjudicial que las instituciones médicas no tengan un registro actualizado con respecto a los nuevos casos de sobredosis opioide, lo que les impide que realicen un seguimiento para implementar los tratamientos correspondientes que ayuden a reducir las estadísticas del alto nivel de mortandad a consecuencia de esta droga.
