Como es sabido, por los científicos especializados en el área de las denominadas neurociencias, el aroma y la percepción a través del olfato juegan un papel muy importante (no determinante) en la construcción de confianza dentro de las relaciones interpersonales. Para los profesionales de la salud, este concepto es pilar en la práctica médica por cuanto se requiere para una adecuada:
- Atención personalizada del paciente;
- Definición de un cuadro sintomático a partir de la descripción de las dolencias;
- El establecimiento de un disgnóstico; y, finalmente,
- La prescripción de un tratamiento.
Por ello, el equipo editorial de Saludiario ha recopilado una serie de recomendaciones prácticas a fin de que esta condición no lesione la imagen profesional de los galenos y el resto del personal de salud al interior del consultorio.
Recomendaciones para cuidar el aroma del consultorio
Ventilación
- Procura habilitar un espacio destinado a la ventilación del consultorio. Analiza en que momentos del día es mejor abrir la ventana para que el aire circule en el consultorio. Esta sencilla operación evitará el que mal olor se estanque en las instalaciones y fluya de una mejor manera.
Natural vs. Artificial
- Los ambientadores artificiales no son tan benéficos para la salud; además, si están conectados a la toma eléctrica representan un gasto adicional de energía. Por esa razón, apuesta por lo natural, es una de las maneras más efectivas y decorativas de disfrutar de un olor agradable. Elige flores fragantes como:
- Narcisos;
- Rosas;
- Jazmín; y/o
- Gardenias.
Cuida los textiles
- Los productos como los sillones, alfombras y cortinas hechos con tela absorben los malos olores con mayor facilidad. Procura limpiarlos constantemente o, mejor, comprar este tipo de aditamentos fabricados con otro tipo de materiales. Lava las cortinas a menudo y cuélgalas un poco húmedas para que desprendan el olor de suavizante.
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