Cerca de 236 millones de niños alrededor del mundo han muerto, en su mayoría, por enfermedades prevenibles en el periodo comprendido entre 1990 y 2015. UNICEF, a través de “Una promesa renovada: Informe de 2015”, señala que desde el año 2000 se ha salvado la vida de 48 millones de menores de 5 años de edad a nivel global, lo que representa descenso de 53 por ciento desde 1990 gracias al compromiso de los gobiernos por cumplir los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), que plantean que para 2030 podrían salvarse 38 millones más de vidas.
En México, por ejemplo, la tasa de mortalidad en niños menores de 5 años se redujo 61 por ciento entre 1990 y 2013, no obstante, aún se presentan patologías que pueden tener desenlace fatal durante los primeros años de vida, entre ellas las Infecciones Respiratorias Agudas (IRAS) que en 2013 ocasionaron 78 defunciones por cada 100 mil niños menores de un año.
Actualmente, entre las principales causas de mortalidad infantil en menores de 5 años se encuentra la neumonía por neumococo, la cual causa cerca de 800 mil decesos cada año en el mundo, de los cuales, aproximadamente 33 mil se presentan en América Latina pese ser una enfermedad prevenible con vacunas.
En este contexto, cabe destacar que “un niño que no cuenta con un esquema de vacunación completo, además de ser susceptible a enfermarse, se vuelve portador de varias enfermedades ocasionando contagio en todo su entorno”, señaló Ana Gabriela Grajales, infectóloga pediatra y Directora Médica de la Unidad de Vacunas de Pfizer, por lo que “es importante que todos los actores de la sociedad sigan implementando las medidas necesarias y adquirir el compromiso de convertir en una norma y una prioridad el salvar la vida de los niños”.
Al respecto, Grajales señaló que la vacuna antineumocócica trecevalente está aprobada en México y se encuentra considerada en la Cartilla Nacional de Vacunación para completar esquemas en cualquier edad infantil, pues “protege contra formas graves de enfermedad por neumococo y neumonía”.
