La entrevista médica es el punto cumbre dentro de la relación médico-paciente. Para que ésta sea de calidad, existen ciertos puntos que debes de tomar en cuenta y que exponemos brevemente a continuación:
Cuida el lugar donde se desarrollará la entrevista
Tu consultorio médico es el lugar ideal para la realización de la entrevista médica, por lo que debes cuidar que sea cómodo, privado, silencioso y bien iluminado. Nunca realices “consultas de pasillo”, pues en estas entrevistas generalmente se tratan temas muy personales e íntimos que requieren privacidad. De igual forma, no permitas que durante la consulta estén presentes más de dos personas, pues la comunicación puede verse afectada.
Mide tus tiempos
Debes tener un registro o una agenda con los horarios de cada consulta médica. Respeta el tiempo de cada paciente indicándoles que deben llegar al menos 10 minutos antes de su consulta. No hagas que tus pacientes pierdan su tiempo en la recepción de tu clínica u hospital. Sabemos que cada paciente es diferente y cada uno de ellos merece un trato personalizado, por eso, para no dilatar el tiempo de espera, debes saber guiar la entrevista y en ella, saber qué preguntar. También es importante que evites que el paciente se desvíe de la conversación principal hacia otros temas sin importancia.
Ten disposición y actitud de servicio
Como profesional de la salud, debes tener siempre disposición y actitud de servicio. No olvides que la integridad y la honestidad también deben formar parte de tu vocabulario profesional.
No influyas en las respuestas
Cuida que las respuestas de tu paciente no se vean influidas por la forma en que preguntas.
Cuida tu lenguaje corporal
Cuida los gestos de tu rostro y el movimiento de tus ojos, así como el tono de tu voz. Si te encuentras distraído, enojado, triste o desinteresado ten por seguro que el paciente lo notará y tal vez esa sea la última vez que lo veas en tu consultorio.
Informa al paciente
Significa que debes explicar al paciente lo que tiene y lo que es preciso hacer para mejorar su estado de salud. Por eso, es importante que digas lo más claro posible su diagnóstico, qué significa, el pronóstico y qué se puede hacer al respecto. También es importante que las recetas sean fáciles de entender y que seas honesto a la hora de entregar la información.
